Carnicería punk: es un centro cultural independiente, una carnicería de barrio inserta dentro de unos block social en pleno Santiago centro, que ha sido intervenida sin modificar su estética de carnicería, para realizar los talleres literarios, presentación, lanzamientos de libros, lecturas poéticas, etc.

Editorial Moda y Pueblo: somos una editorial independiente, trabajamos a partir de la fotocopia y corchetera; ediciones limitadas y enumeradas que buscan ser vendidas a bajo precio y rescatar el concepto estético de fetiche del libro por medio de diseños de libros objetos, es decir reivindicar desde la cita comercial, al libro como un objeto único de arte, inclasificable e inencontrable.

jueves, 3 de junio de 2010

Micropoliticas de Resistencia

Prólogo
Micro políticas de resistencia

Como si fuera una barricada, frágil y parchada, como si ya nos hubiéramos equivocado en todo y con todos, la historia de amor, el deseo, las madres, la histeria del cariño, todo esta contabilizado en este primer mes del año, de un bicentenario aterrador, institucional y peligroso, cercado por la derecha en el gobierno, por el regreso de esa tradición fascista y criminal del mismo pasado y su dictadura siniestra. Como si desde el único lugar en que se pudiera decir era este, el encierro, el propio cuerpo, la historia individual pero colectiva, porque como muchas veces lo hablamos, el decir mi cama, puede ser decir mi plaza, mi barrio, y decir mi barrio es hablar del país y sus instituciones. Porque el mal amor, o el padre, es también el poder. Por eso originalmente este taller literario se llamaba arte y política, pero debido a la biografía, a la cicatriz personal de sus autores, y a lo anónimo y maltratado que nos deja la ciudad entera, no podíamos llamarlo así, y decidimos intervenir el nombre y desde la tachadura original, inscribirlo como taller de arte y micro políticas.

Porque la rabia, es mucha, y el deseo también. Por eso es necesario volver a las citas, a la palabra pueblo, mas que la palabra moda, a instalar la política, la rebeldía y el país en llamas como lugar común, están necesario volver al romanticismo de los Campesinos, estudiantes, obreros, las banderas, las mujeres que se ha unido al clamor popular - como dice la canción, las velitas haciendo un corazón inmenso, como pequeña acción de arte, intentando instalar la carnicería en llamas, pero ya no llamas simbólicas, sino furiosas y candentes, fuego que surge desde el movimiento que irradia las calles, las plazas y ojalá las camas de los padres. Es necesario, es absolutamente necesario, que ahora se incendie la palabra venceremos en las murallas públicas, porque sino la gente se olvida, sino la gente habla de pasado, sino el país se desmemoria y no alcanza a dimensionar la perdida y el dolor, por eso es necesario preguntar en que momento nos olvido la patria y sus atribuciones masculinas, en que momento nos dejaron jugando solos encerrados en esta sala blanca mirando de lejos o de muy cerquita a los chicos mas valientes que están haciendo de la poesía una mano incendiaria en el poema molotv de la resistencia.

Pero ya nos olvidaste chile, ya nos dejaste de lado, solas, aniquiladas, chamuscadas, muertas de miedo, ya nos mataron tantas veces- como dice esa otra canción, fueron tantas las banderas para ver sonreír al país como una gran macro empresa, o una inmensa trasnacional.

Aquí están las escrituras de sus micro políticas, de sus pequeñas y hermosas rebeldías, a veces desde la cicatriz como un mapa de insistencias en Daniela Escobar, o como esa lengua materna que no habla Bryan Herranz, y desde la imagen fotográfica la foto performance como manifiesto intimo de Claudia Rodríguez que no pega un ojo sin que su nombre se pose en su cordel. Hasta la ternura homo erótica de Oscar Hurtado con un chico brillante y desnudo, cantando en la pantallita del computador, o desde Isabel González, desde el silencio, de los sin discursos en un manifiesto donde ya no queda nadie a quien creer, o la imagen de la Viuda, del desentierro y los muertos pendientes citados por Álvaro Cordero y su apuesta por el deseo como único camino posible, desde el sistema económico que nos aplasta igual que el amor y sus dominaciones.

En este libro esta lo furioso de nuestros cuerpos, o de nuestros abrazos, porque nos encerramos a mirar o explicarnos precisamente eso, que nos había pasado, que nos hicieron en el camino. Entonces era mejor sonreír, querernos así con esas patas de perros que nos salieron a todos con forma de niños solos o como esas hermosas domesticaciones que tiene el amor, porque las micro políticas nuestras, son esos pequeños y simbólicos detalles, es la forma de mi pelo, la manera en que lo miro cuando me hace daño, es la forma en que nos acarician debajo de la cama, o en la última pieza del fondo de la casita nacional. A veces tristes, pero salvajes, furiosas pero abandonadas por la gente que casi ya no nos mira.

Aquí, estan presentes todas esas micro políticas del amor, de la rabia, de las chicas que ya no quieren, del chico mayor que los maltrato por años, del cuerpo herido, de sus bazos encendidos, de sus batallas perdidas, de sus canciones románticas, por eso pensamos en un corazón, en un corazón kitsh románticon y encendido, en medio de la carnicería punk, como lanzamiento y performance de iluminación, lo pensamos así, histérico, afeminado tele novelesco, lleno de tierra humedecida, como cercar el cariño, como cercar mi territorio carnicero, “porque aquí ya no entra cualquiera”, “porque aquí ya no lee cualquiera”, menos en estos tiempos en hasta el mejor amigo puede vender sus sueños y sus utopías por el pacto y el poder. Como si se pudiera cercar el país ahora desde nosotros, desde los perdidos, los equivocados, desde lo que vemos este marzo del 2010, la fatalidad y el error, de olvidarse de nuestros muertos y de nuestra historia. Aquí estamos, en este fanzine como estrategia romántica, los últimos, los que boto la ola, estamos todas las olvidadas del país.

Diego Ramírez Gajardo.-

a partir de un Corazon en llamas
en el 2 ª Aniversario de la carniceria punk: " Nada de moda, todo de Pueblo"
invitada especial: Gladys Gonzalez, y lectura de los alumnos del taller .-
(prólogo del Fanzine del taller arte y micropolíticas)

Enero, 2010.-






"Compañeros poetas,
tomando en cuenta los últimos sucesos
en la poesía, quisiera preguntar
——me urge—,
¿qué tipo de adjetivos se deben usar
para hacer el poema de un barco
sin que se haga sentimental, fuera de la vanguardia
o evidente panfleto"

- Silvio Rodriguez -