Carnicería punk: es un centro cultural independiente, una carnicería de barrio inserta dentro de unos block social en pleno Santiago centro, que ha sido intervenida sin modificar su estética de carnicería, para realizar los talleres literarios, presentación, lanzamientos de libros, lecturas poéticas, etc.

Editorial Moda y Pueblo: somos una editorial independiente, trabajamos a partir de la fotocopia y corchetera; ediciones limitadas y enumeradas que buscan ser vendidas a bajo precio y rescatar el concepto estético de fetiche del libro por medio de diseños de libros objetos, es decir reivindicar desde la cita comercial, al libro como un objeto único de arte, inclasificable e inencontrable.

lunes, 22 de noviembre de 2010

"Corazona" de Fabian Farías

EDITORIAL MODA Y PUEBLO invita a usted al lanzamiento de CORAZONA de Fabian Farias. Presentacion a cargo de Francisco Casas y Diego Ramírez.
Martes 23 de nov. 19. hrs,
en la Biblioteca de Santiago.




Fabián Farías Quijada, (Curicó, 1983). Egresado de Derecho de la Universidad de Talca. Integró el taller de poesía “La Pecera” de dicha Universidad, dirigido por la poeta Marcela Albornoz Dachelet, donde participó en cuatro antologías poéticas: “Irreverencia” (2006), “Letras contra el muro” (2007), “Poetas de la Blasfemia y otras Herejías” (2008), “Carnada” (2009). Participando además en recitales poéticos en las ciudades de Talca, Chillán y Santiago. Desde el año 2009 forma parte de los talleres de poesía Moda y Pueblo dirigidos por el poeta Diego Ramírez, siendo incluido en la antología poética “Romantic Pop” (2009).


Corazona, es el habla desbordado de la campa, es la forma de invertir el lenguaje para volverlo neobarroco, inquieto y desafiante. Corazona es la boca sucia de la versión Queer Larica del desenfreno, una campa con rufianes hermosos seduciendo las imposibilidades de la provincia, homosexualizando ese paisaje que sólo conocíamos desde Teillier. Corazona es la frontera expatriada donde se cruzan las voces de las amigas, que enseñan a sobrevivir a la noche candente de la “disca”, porque “la cuerpa” y “la fuega”, son parte del habla de la Bladi o de la Joela, o de la Sergia. Esta última, haciendo de madre es la que le pide una poepsia y es en ese gesto donde se rebela la construcción de la poética kitsh de este libro. Corazona llega de las Talcas, arrebatada de la meseta campesina, porque la noche que fue bautizada la advirtieron que a esta ciudad se venia a morirse y entonces empezó su “capceria”, y la madre - Sergia le enseñaba a darse vuelta a los hombres, en una fiesta constante donde no le tienen miedo a nada. La Corazona se pregunta “¿cómo se dice: corazón o corazona?”. Entonces, Corazona es la que sobrevive a los matorrales rebeldes que crecieron solos, rufianeando por los rincones hermosos de la cerra que se hizo cerra, de la camina que se hizo camina, y de la ciela que se hizo ciela, hasta que llego el derrumbe, como el quiebre simbólico del lenguaje de este libro. Corazona es Fabían Farias, quien ejecuta un trabajo límite entre metáfora, lenguaje y territorio. Corazona es el corazón afeminado de este libro y es el árbol torcido de la provincia.

DIEGO RAMIREZ

"Me fui un día antes del desastre. Me fui, eché llave, cerré candados y círculos. No pueden decirme que no lo intenté. La Joela ya no estaba, la Joela también se había ido antes que yo, entonces cayeron de la ciudad sus estatuas, escuché rebotar las cabezas en la placita de la dos sur, las poblaciones se multiplicaron, el barrio norte dejó de ser norte, el barrio norte ahora era sur, y todos los puntos cardinales, la ciudad se abría, ví crecer Blocks, botillerías, y casitas parecidas a la mía, la Sergia me lo había advertido, -si te vas, esta ciudad se va contigo hija-, guardé mi ropa, habían tantas cosas que no eran mías, y me faltaban tantas otras también, todas mis cosas ahora aparecían divididas, de a dos, confundidas entre ropas que prefería no mirar, haciendo de tripas corazón me despedí de la Sergia, vete Corazona que la ciudad se nos cae a pedapzos, sentí la gente vaciarse y salpicar el pavimento, un surco que salía del piso subió por la pared del block G depto. B hasta llegar al techo, sola con mi soledad, sola sin tu compañía, fue la última vez que escuche cantar a la Sergia antes de cerrar la puerta y dejarla sentada fumando sus cigarras mentoladas. Afuera la ciudad había cubierto toda hasta la campa, los rufianes me vieron y corrieron a escoltarme hasta la salida, -¿porque se va?, usted no era como los otros, lo vamos a echar de menos-. Después de eso no quise mirar atrás, lo pensé y se me saló la piel."

Nacidas y criadas, hechas y deshechas despertamos en un pueblo subterráneo de provincia, echándole leña al fuego del infierno grande, distorsionadas fumándonos las nubes en el cerrillo del tranque donde vimos por primera vez el sol. Porque para nosotras todo el año fueron vacaciones de verano. En provincia todo pasando. Y no le copiamos la moda a nadie, y pensamos en un futuro donde siguiéramos siendo amigas y viviéramos más cerca sin tanta campa que atravesar, y pensamos mientras nos acostumbramos a viajar largas horas para llegar a nuestro destino, y viajamos dejando todo perderse entre las cerras con nuestras madres amasándose el corazón, siempre estaremos de paso, porque nunca dejaremos de hacer el engaño de la despedida.



Fabian Farias


3 comentarios:

Alejandra Osses dijo...

Aún no lo leo, pero sé que es maravilloso....Conozco la obra de Fabián Farias, conozco a lo hermoso que es FAbián Farias y por eso doy la certeza de que el libro es MARAVILLOSO....

FELICITACIONES....

Anónimo dijo...

Fabián, estoy gratamente sorprendida por lo escrito por tí.. al leer "block G, dpto B" no pude dejar de recordar los grandes recuerdos que tengo de ese lugar. Éxito y Felicidades. Un abrazo.

Yélika Ibarra González.

Anónimo dijo...

Me falta un 50% de la plenitud del libro y me deja muy buena imprecion,no lo he leido todo por falta de tiempo,estaremos en contacto fabian; felicitacioones.